Desde Portugal, mi amigo y payaso Enano Torres nos cuenta sus vicisitudes y frustraciones al intentar ser reconocido como payaso de calle. Esta situación sucede en Lisboa pero podría ser un ejemplo de las no respuestas obtenidas por otros payasos en diferentes ciudades como Barcelona, Madrid o Viena.
«Llevo mas de un año llamando cada 2 meses a la Cámara de la Capital a cuestionarles y las respuestas dadas son a cuentagotas, los avances son a paso de caracol; casi siempre que llamo me ponen el rol de Estatua o Músico ( con todos mis respetos a ellos/as) sin saber que existen Payasos que también le gustan «mamar» en la calle que los parió y otros artistas con diferentes lenguaje ( danzarinas, malabaristas, pintores, escultores..)
Estoy cansado de decir que Lisboa podría ser con sus bellos lugares, parques,miradores y plazas que tiene, asín como el clima podría ser un lugar de referencia del Teatro de Rua; pues tiene todos los condicionantes para ello, incluso podría estar reflejado en la Guía Cultural para los extranjeros que nos visitan, diferentes lugares concretos donde saben y pueden disfrutar del Arte Libre, donde aparte de ver nuestros exquisitos monumentos , probar los pasteles de belem y subir al Castelo podrían tener nomeados espectáculos de Calle al servicio de ellos y no solo , sino del pueblo lisboeta y allegados. Esto hace CRECER a una Capital a traves de la Cultura!!
Recuerdo para el que no sepa que algunas capitales europeas ya tienen ello! Que es necesario para ello ?? un poco de sentido común, sensibilidad, respeto y ganas de tener una Capital donde el Teatro y el Arte haga florecer y colorear aun más la bella Señora llamada Lisboa.
Para cuando ?? como la señora me dice «se calhar por Abril, Maio, Junho»… una cosa tengo clara : No hacen las cosas simplemente porque NO SABEN!!!!!!
¿Por cuánto tiempo tendremos que aguantar sus constantes Ignorancias y descréditos de aquello que amamos y deseamos?
Ahora bien: no vamos a renunciar a la lucha!»
Gerardo y Laura son Potato Omelette Band. La banda que se presentó a las pruebas del Ayuntamiento de Madrid para evaluar a los músicos callejeros ( ya que a los payasos simplemente nos los contemplan) y terminó cantándole a Ana Botella ante la mirada estupefacta de los tres miembros del «comité de idoneidad»:»Gracias alcaldesa por permitirnos hacer una prueba para tocar en la puta calle». No tiene desperdicio.
